Este Testimonio es de una amiga. Dónde Dios nos enseña que cuando nos despojamos de aquellas cosas que ocupan su lugar en nuestro corazón, es allí cuando nos serán concedidas…
¿Cómo hago para resumir 15 años? Cuando nos casamos con Gerardo, que ya llevamos 17 años de casados; habíamos decidido esperar un tiempo antes de tener hijos Para darnos un tiempo de conocernos y acoplarnos bien.
Cuando por fin nos decidimos, empezaron a pasar los meses, un año, dos años, tres Y nada…
Como sabíamos que lo psicológico a veces actúa en contra, y que a veces cuando uno más quiere un bebé, menos llega; no le dimos importancia… Y estábamos inmersos en nuestras ocupaciones: trabajo, estudio, etc…
Cuando ya hacía 13 años que estábamos casados, me empezó a doler en el alma no poder tener un hijo Y empecé a pensar en la posibilidad de una adopción; pero le preguntaba a Dios: “¿Podré querer como a un hijo a alguien que no haya salido de mi?”… Y con su particular trato, Dios me respondió que SI. a través de un jovencito que por ese entonces tenía 12 años… Ese mismo año decidí Renunciar en mi corazón a ese sueño, Quería estar agradecida con Dios, aún por aquellas cosas que no nos daba.
Por fin en el año 2007 pude estar agradecida de corazón al hecho de no ser mamá. Sólo Dios supo esto Que le daba gracias con sinceridad, porque Él sabía lo que era mejor Fue entonces cuando Él dijo: “Ya es tiempo”… Y quedé embarazada!!! en Febrero de 2008 tuvimos a Jimena.
Sé que estar agradecida de todo corazón al hecho de que Dios sabe qué es lo mejor, y que si no me da algo sabe el porqué, eso hizo la diferencia, porque después de todo; es el corazón lo que Dios ve.
